“Y ninguno que beba del añejo, quiere luego el nuevo; porque dice: El añejo es mejor.”
Lucas 5:39
Los fariseos habían bebido de la Ley de Moisés y todos sabemos que la Ley es buena, espiritual y perfecta, por eso, estos “observantes” de la Ley decían:
“Nosotros hemos bebido del Vino Añejo y NO necesitamos vino nuevo porque sabemos y entendemos que el vino añejo es mejor.”
Lógicamente, los que se aferran a la Ley de Moisés, no entienden que cuando Dios hace algo nuevo es MUCHO MEJOR que todo lo antiguo, es cierto, que la Ley es buena, pero la Gracia es mejor, es cierto que el Antiguo Pacto es bueno, pero el Nuevo Pacto es mejor, la vida que ahora podemos disfrutar EN el Mesías, ES MUCHO MEJOR, aunque los que hayan probado el vino añejo y se aferran a la Ley de Moisés digan justo lo contrario.