“Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia, prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad.”
I Timoteo 4:1
Pablo nos pone un par de ejemplos de estas “doctrinas de demonios” . . .
- Prohibirán casarse.
- Mandarán NO comer ciertos alimentos.
Cuando pensamos en los demonios, nos imaginamos a seres que fomentan el pecado, que fomentan el “todo vale”, sin embargo, hay demonios que mandan y prohíben ciertas cosas como hemos podido leer.
El diablo y sus demonios son espíritus engañadores y tristemente han engañado a muchos . . . ¿cómo presentan sus mentiras?
- Si ayunas, Dios te va a escuchar.
- Si evitas comer ciertos alimentos y ciertas bebidas estarás agradando a Dios y serás más justo.
- Si no te casas, vas a ser más santo y vas a poder servir al Señor mejor.
Estas son las doctrinas de demonios de las que Pablo nos habla, por eso, es muy importante saber quiénes somos en Cristo y lo que Él nos ha dado. Afirmemos nuestro corazón en la Gracia de Dios, no en mandamientos, ni en prohibiciones.
“No os dejéis llevar de doctrinas diversas y extrañas; porque buena cosa es afirmar el corazón con la gracia, no con viandas, que nunca aprovecharon a los que se han ocupado de ellas.”
Hebreos 13:9
