“No se turbe vuestro corazón; creed en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas moradas; si no fuera así, os lo hubiera dicho; porque voy a preparar un lugar para vosotros. Y si me voy y preparo un lugar para vosotros, vendré otra vez y os tomaré conmigo; para que donde yo estoy, allí estéis también vosotros. Y conocéis el camino a donde voy.”
Juan 14:1-4
Jesús les dice a sus discípulos que iba a preparar un lugar para ellos, una morada en la Casa del Padre, ¿cuándo prepararía ese lugar? ¿cuándo prepararía una morada en la Casa del Padre? . . . Cuando Jesús murió en la cruz. Al morir en la cruz, Jesús llevó los pecados del mundo y perdonó todos los pecados de los hombres, al morir, Jesús preparó una morada en la Casa del Padre para los que creemos en Él.
“No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros. Un poco más de tiempo y el mundo no me verá más, pero vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis. En ese día conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.”
Juan 14:18-20
Jesús les dice a sus discípulos que no les iba a dejar huérfanos porque aunque iba a morir, también iba a resucitar. Jesús vendría a ellos y aunque el mundo no le vería (ya que Jesús iba a morir en la cruz), ellos SÍ le verían (porque iba a resucitar e iba a vivir en ellos), el mismo Jesús dice que “en ese día”, es decir, cuando resucite y venga a vosotros, “conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.”.
Recordemos lo que dijo en el versículo 3:
“Y si me voy y preparo un lugar para vosotros, vendré otra vez y os tomaré conmigo; para que donde yo estoy (en el Padre), allí estéis también vosotros.”
Jesús dijo que cuando resucitase, vendría a ellos y les tomaría con él para que donde Jesús está, ellos también estén, Jesús les está diciendo que ellos estarían en la Casa del Padre porque Jesús está en el Padre y ellos estarían en Jesús:
“En ese día conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.”
Juan 14:20
Jesús está en el Padre, nosotros estamos en Él y Él está en nosotros. ¡AleluYah!
Gracias a la muerte de Cristo, nosotros tenemos una morada en la Casa del Padre, gracias a lo que Jesús hizo por cada uno de nosotros, tenemos un lugar en el corazón del Padre, Jesús está en el Padre, nosotros en Él y Él en nosotros.
“Si alguno me ama, guardará mi palabra; y mi Padre lo amará, y vendremos a él, y haremos con él morada.”
Juan 14:23
Todos los que amamos al Señor, todos los que hemos puesto nuestra fe y confianza en Él, tenemos la presencia del Padre y de Jesús en nuestras vidas, ahora somos morada de Dios, por eso, Pablo afirma que:
“¿No sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?”
I Corintios 3:16
“Porque nosotros somos el templo del Dios vivo, como Dios dijo: HABITARE EN ELLOS, Y ANDARE ENTRE ELLOS; Y SERE SU DIOS, Y ELLOS SERAN MI PUEBLO.”
II Corintios 2:16
Gracias a Jesús, tenemos un lugar en la Casa del Padre, Jesús ha preparado ese lugar a TODO AQUEL QUE CREE EN ÉL.
Jesús está en el Padre,
nosotros estamos en Él
y Él está en nosotros.
¡GLORIA A SU NOMBRE POR SIEMPRE!